Con un ojo raíz y otro ojo viento
te despiertas al mundo cada día
y desayunas mate pan con ataduras de temprano
y buscas una razón de tu existencia
que es puro presente
que el ayer en tu vida no es mañana
ni ahora, ni futuro traspasado
que puedes liberarte de la tierra
cuando el infierno que habita en ella
resulte para vos una amenaza.
Y si pretendes que tu ojo viento lleve
porque el viento es piel que te acaricia
te trastoca y sueña
puedes convertirte en nube y dejarte ir con el viento
y te gustaría que en vez de raíz, tu otro ojo fuese agua
porque el agua escurre, limpia y
te libera
sacia la sed que amenaza con agrietar ya la garganta
puedes hacerte río para no regresar.
Y si descubres que no existe más razón ni más secreto
que el secreto de ser feliz a cada instante
sin importar después y hacer que te apetezca
ese segundo por el hecho de querer vivir a pleno
sin culpas, ni tampoco excusas
porque tu tiempo es solo tuyo, único
perfecto, no habrá otro tiempo para vos
que aquí y ahora,
tienes que aprovechar y disfrutarlo a gusto
sin que nadie te pida explicaciones
sin que nadie te prohíba, te ate,
te condene,
ahora o nunca,
éste es tu momento.