No le tengo bronca a la política.
No le tengamos bronca a la política.
Cualquiera de tus posturas
por sí o por no,
por blanco o por negro,
es política.
Cuando decís "no sé nada",
"No quiero saber nada",
"No me importa",
eso es una forma de la política.
Porque la política es
para mí,
como esa hermosa joven
que, a la vuelta de la esquina,
que, a través de las grietas,
extiende su mano
a una anciana,
a un ciego,
a un niño,
a los que nadie ve,
y les entrega
un pan,
un abrazo,
una estrella,
una
flor
azul...
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