NIDIA TINEO-PRESENTACIÓN LIBRO HAY UN MONSTRUO EN MI COCINA

DÍA PROVINCIAL DEL LIBRO INFANTIL Y JUVENIL - MENDOZA, 21 DE JULIO


COMO PEZ AZUL - de nidit.


Como pez que a cada instante
agujerea,  hace espacio con su cuerpo
en el silencio del agua
como pez acróbata que 
queda expectante,
mira, sin hacer otro gesto,
y parece  muerto
a no ser por los ojos abiertos,
por apenas la boca,
pero al cabo del tiempo
mueve aletas, busca inquieto,
respira,
aunque sigue su huida hacia la oscuridad
de donde vino. 
Así,
como pez azul a mitad de camino
a mitad de quietud
a mitad de la nada
yo, bebo de la luz
atravieso el día
buscando abrir color en el vacío.

                       Nidia C. TINEO

FELIZ DÍA DEL AMIGO!


"NO CAMINES DETRÁS DE MÍ,
PUEDO NO GUIARTE. NO ANDES
DELANTE DE MÍ,
PUEDO NO SEGUIRTE.
SIMPLEMENTE CAMINA A MI LADO
Y SÉ MI AMIGO"  (A. Camus)


PREGUNTA - nidit


Si una  recuerda a alguien 
el hilo invisible une  a  través
del tiempo y la  distancia
y luego, vuelve a pensar sobre lo mismo 
las hebras del pensar que  traen
el nombre en medio del silencio...
cómo  hacer para 
olvidar
por qué olvidar 
si el cuerpo se rebela
y se pone alerta
con la sola imagen

mi corazón ha quedado detenido
en esos ojos
y no quiere latir por otra cosa.

                                                     Nidia TINEO        

CUANDO ABRO LOS OJOS- poema de nidit.


Por el solo hecho
de que no quede este lugar vacío,
porque pienso
acodada
sobre la mesa y
huelo su madera,
cuando interrogo al mundo
el por qué de las guerras,
y no gastar hasta el último
segundo en estar vivos,
cuando abro los ojos
para ver lo que está detrás del prado,
cuando escucho a otra  voz humana
y miro de frente, 
cuando recojo a una paloma herida,
la sano y la devuelvo al viento,
porque mi corazón late
mis pies saben de la tierra
y mis manos del agua,
porque sufro pero no me resigno
porque amo aunque
no me amen
sé que existo
y no soy solo parte 
de un
sueño.
                           Autora: Nidia TINEO

TRENZAR CABELLOS - DE PAOLA KLUG


Decía mi abuela que cuando una mujer se sintiera triste lo mejor que podía hacer era trenzarse el cabello; de esta manera el dolor quedaría atrapado entre los cabellos y no podría llegar hasta el resto del cuerpo; había que tener cuidado de que la tristeza no se metiera en los ojos pues los haría llover, tampoco era bueno dejarla entrar en nuestros labios pues los obligaría a decir cosas que no eran ciertas, que no se meta entre tus manos- me decía- porque puedes tostar de más el café o dejar cruda la masa; y es que a la tristeza le gusta el sabor amargo.

Cuando te sientas triste niña, trénzate el cabello; atrapa el dolor en la madeja y déjalo escapar cuando el viento del norte pegue con fuerza. Nuestro cabello es una red capaz de atraparlo todo, es fuerte como las raíces del ahuehuete y suave como la espuma del atole. Que no te agarre desprevenida la melancolía mi niña, aun si tienes el corazón roto o los huesos fríos por alguna ausencia. No la dejes meterse en ti con tu cabello suelto, porque fluirá en cascada por los canales que la luna ha trazado entre tu cuerpo.

Trenza tu tristeza, decía, siempre trenza tu tristeza…

Y mañana que despiertes con el canto del gorrión la encontrarás pálida y desvanecida entre el telar de tu cabello."
Paola Klug

MUJERES, poema de nidit.


Hay tantas mujeres,
una que recoge el agua
en  cántaro azul
para beber de las palabras,
aquella que atravesó
mares secretos a intentar amor
 y  ardió su corazón  en una hoguera,
la que volteó murallas
con  aliento y
perdió  alas al aire,
otra más,  hundió 
sus manos en desiertos
y extrajo  sal,
la que lloró a su madre
ante la muerte,
y guardó el último
suspiro de su padre,
más allá,   otra,
ahuecó  la arena y 
enterró sus dientes
para que crezcan árboles,
la que dijo no y fue apedreada,
la que apostó las únicas monedas por sus hijos
y quedó sin nada,
la que encendió la llama, 
la que puso palos en la rueda,
la que giró la rueda y empujó del carro,
la rebelde, la esquiva,
la doliente
aquella que arrojó los trastos por la ventana,
la  que espantó fantasmas,
y la otra, que pintó una puerta roja.
Estoy en ellas por fuera y por adentro,
otras tantas, 
todas
me habitan
AUTORA: Nidia TINEO

POEMA DE IDEA VILARIÑO


Hoy tengo el corazón frío y azul,
los ojos de neblina
y las manos heladas.
Ah, madre,
qué cansada estoy,
qué cansada.
Si ya no puedo más con este fardo
este fardo sombrío
que me he echado a la espalda.
Y estos que van conmigo
y que me escuchan
se miran y preguntan
¿De que fardo nos habla?
Ah, madre,
no sabes como estoy
de cansada.
(1941)

REINVENTAR EL MUNDO- de nidit



que la ilusión  encienda 
cada día (n.t.)

                                   

DIA DE LA INDEPENDENCIA





TUCUMÁN LIBERTARIA- de NIDIA TINEO

VIEJA CASA- Poesía de Nidit.


Vieja casa sin nadie,
no será fácil habitarla
cada ladrillo
cada baldosa
cada puerta
cada mancha en la pared
aquella rotura del cerámico
la maceta con aquel geranio blanco
el rosal púrpura en el portal de entrada
no, no será fácil
la  solitaria mesa dirá
a mí me construyó
alguien
varias mujeres 
y también hombres
amasaron sobre mi tabla,
al mediodía, un puñado
de gorriones comían siempre de mis platos
y la pequeña de rulos rubios,
no quería la sopa
mientras  la otra,
cuando hacía tareas
me dejaba sus chicles
pegados en la espalda
No, no será fácil
cada rincón 
habla por sí solo
y es que
la vieja casa
aunque esté cerrada
nunca ha estado vacía.
                                     POESÍA de: Nidia TINEO


PERRA VERDE- de Nidit.


Como perra verde
hurgo en las fotos amarillas
en los trastos antiguos
para buscar lo que no
se puede hallar porque 
quizás, no exista.
Lo único cierto
este sentimiento,
esta sensación
inacabada de 
la vida
y que el amor no acaba
cuando muere la noche,
pero no,
tal vez sea todo
fraude, 
un eco entre la gente
algo plástico
envases vacíos
espejismos de ternura
que no van más allá
de la muerte.
                                         Autora: Nidia Tineo

TUCUMÁN LIBERTARIA- de NIDIA TINEO

SUEÑOS DE ARENA- de Nidia TINEO


Por qué aferrarse
a  sueños que no fueron, 
un puñado de arena 
solo arena
pero te empeñas
en seguir la calle,
por la misma calle,
con los pies desnudos
sobre las espinas.
Al cerrar la puerta
la traición detrás
en el vaso mismo
donde de beber
dabas, por qué 
permanecer entonces,
por qué
este transcurrir quebrado
con heridas a cuestas,
apenas a la rastra, 
doliente
por vos y por los otros,
por qué pregunto,
no caben respuestas
si la vida,  es soplo
el tiempo, un invento 
los sueños, cenizas
y vos,
y vos solo barro.




CIELITO DEL CALDÉN- POESÍA DE NIDIA TINEO

SERAFÍN Y RENATA- POESÍA INFANTIL DE NIDIA TINEO

CÁRCEL- nidia tineo

Afuera nieve
miro desde las piedras
por la única ventana
de la torre vacía
busco y no
puedo huir
por ningún
sitio
la cárcel
ha
sido consumada
para
atar a los locos
a los débiles
a los que sueñan
y hablan con los árboles
a los marcianos
a los cobardes
a los que no soportan
lo que ven en la tierra
y buscan un mal rincón
que los
tenga ajenos,
y a los idiotas 
que no pueden decir
basta,
porque
entre ellos,
me encuentro.

GRITO POR VOS- POEMA DE NIDIA TINEO


Desde  tiempo
a esta parte
grito por vos
mi grito cae y cae
por un hueco en las piedras,
lleva música,
puse las manos a cada lado de la boca
para que ni un solo  sonido de tu nombre
se perdiera.
Te he llamado, desesperadamente
te he llamado,
y el grito fue profundo
como profundo es el ansia
de sentirte cerca
y la locura que envuelve 
los miedos
Grito por vos cada  momento,
en las orillas de las sombras,
en los bordes de la niebla,
con la médula, con la piel,
con los ojos donde habitan
los sueños 
y mi grito
busca éxodo mañana,
persiste como remolino de sed
como punta de lanza  atraviesa tiempos
no quiere gemir en
catedrales
aunque sean sagradas.
Quiere encontrarte y pronto,
en el
mapa profano.


Nidia Tineo - Vos, la luna y yo

LA LUNA ALUNADA- Un cuento de Nidia TINEO - Narradora: Luján Cabrera- Cuenta cuentos de Corpico

PAMPA - poema de nidia tineo

FOTOGRAFÍA DE ANDREA TALONE


Yo fui aire
viento, polvo, arena,
cardo, agua,
barro.
Yo era madre-hija,
hermana y padre
tía y madre,
abuela y madre.
Yo fui peón,
caballo, alfil y torre
nunca reina.
Yo era maestra, antes
de ser aprendiz
y antes que raíz fui madera,
la tierra
me inició en el oficio de dar;
y el sol eligió quedarse
en mi regazo;
supe de fronteras por el agua;
los vientos
me pusieron alerta;
la suavidad, se la quité a los médanos
y las espinas, al cardo.
Todos los recuerdos no ardieron
con el último fuego
y del aire
tracé en  el horizonte 
sueños
que no fueron
solo míos.

FOTOGRAFÍA DE ANDREA TALONE

Pesebre navideño. Autora: Nidia Tineo